Egeo (el rey de Atenas) tenía que pagar a Minos (el rey de Creta) , ya que era acusado de haber matado a su hijo. Egeo debía entregarle cada nueve años siete niños y siete niñas para ser llevados con el Minotauro (mitad hombre,mitad toro), nacido de las relaciones entre Pasifae y un toro. Nada más nacer lo encerraron en un laberinto diseñado por Dédalo.
Era el año en que debía hacerse la entrega y Teseo le preguntó a su padre donde eran llevados esos niños. Su padre le contó la historia, y Teseo quedó horrorizado, por lo que decidió irse con ellos. Así, partió hacia Creta, y una vez hallado en el palacio de Minos, le contó a este su plan,diciendo que si lo conseguía , Atenas quedaría libre, por lo que el rey aceptó creyendo que no lo conseguiría. Pero su hija Ariadna se enamoró de Teseo al verle, por lo que decidió ayudarle dándole un ovillo de hilo que le dio Dédalo, el cual ayudaba a salir del laberinto. A cambio, Ariadna le pidió que cuando saliese del laberinto la llevase con él y se casasen.
Cuando Teseo llegó al centro del laberinto, encontró al Minotauro despierto y furioso, con actitud de embestirle. Cuando empezó a cansarse Teseo lo cogió por los cuernos y empezó a golpearlo. Tras esto, el Minotauro murió y al salir del laberinto todos comenzaron a aplaudir, ya que además de salvarse él, había salvado al resto de niños.
Laberinto
No habrá nunca una puerta. Estás dentro
y el alcázar abarca el universo
y no tiene ni anverso ni reverso
ni externo muro ni secreto centro.
No esperes que el rigor de tu camino
que tercamente se bifurca en otro,
que tercamente se bifurca en otro,
tendrá fin. Es de hierro tu destino
como tu juez. No aguardes la embestida
del toro que es un hombre y cuya extraña
forma plural da horror a la maraña
de interminable piedra entretejida.
No existe. Nada esperes. Ni siquiera
en el negro crepúsculo la fiera.